¿Cómo vencer la adicción a los hidratos de carbono?




¿Cómo vencer el deseo irrefrenable de consumir carbohidratos?

Te voy adelantando que la tarea es posible pero nada fácil.
Antes de ver las herramientas que podemos utilizar para superar esta adicción, tenemos que entender por qué se produce el impulso de comer hidratos de carbono.
En este artículo me voy a enfocar sobre el papel de los carbohidratos de alto índice glucémico capaces de desencadenar los síntomas adictivos. (Fáciles de encontrar como ingredientes en alimentos procesados, ultraprocesados, comidas rápidas, golosinas, refrescos y dulces, entre otros).

 

La evidencia científica muestra que:

  • Las respuestas conductuales a ciertos alimentos son similares en comparación con las sustancias de abuso.
  • La regulación de la ingesta de alimentos y la adicción dependen de circuitos neurobiológicos similares.
  • Las personas que sufren de obesidad o adicción muestran patrones similares de activación neuroquímica y cerebral.

Los carbohidratos de alto índice glucémico provocan un cambio rápido en los niveles de glucosa e insulina en sangre. Lo que lleva a modificar la concentración de dopamina (neurotransmisor), provocando antojos de adicción.

En al menos un subconjunto de individuos vulnerables, los carbohidratos de alto índice glucémico desencadenan respuestas neuroquímicas y conductuales similares a la adicción.
Estas adicciones conductuales, también conocidas como rutinas o hábitos se llevan a cabo para obtener una recompensa.
Esto desencadena:
  • Antojos de "alimentos problemáticos"
  • Tolerancia (se necesitan más alimentos para satisfacer los antojos)
  • Control limitado de la ingesta de alimentos
  • Intentos fallidos por reducir la ingesta
  • Síntomas de abstinencia

 

Sistema de recompensa mesolímbico:

El sistema de recompensa mesolímbico evolucionó para dirigir a los organismos hacia la búsqueda de estímulos favorables; por ejemplo, alimentos con alto contenido calórico en tiempos de escasez, alimentos dulces (que representan suministros de energía no tóxicos) y otras recompensas naturales como el agua y el apareamiento.
Este sistema desempeña un papel fundamental en la regulación de la ingesta de alimentos.
Se ha observado que los ratones transgénicos que carecen de señalización de dopamina demuestran una pérdida completa del comportamiento de búsqueda de alimentos y mueren de hambre.
Si bien la dopamina es un neurotransmisor crítico en el sistema mesolímbico, muchas otras familias de neurotransmisores están involucradas y modifican la concentración de dopamina.

  • Al consumir un alimento "problemático" como los hidratos de carbono simples y/o refinados, aumenta la concentración de dopamina en el sistema mesolímbico y, en consecuencia, aumenta la motivación alimentaria.

  • Con el tiempo, la señalización de dopamina perpetúa el ansia y la búsqueda de alimentos. El consumo se vuelve habitual y compulsivo. De esta manera, la ingesta de alimentos se ve impulsada por la necesidad de evitar los síntomas de abstinencia en lugar de por el placer y las necesidades homeostáticas.

  • Se cree que las adicciones conductuales están mediadas por el condicionamiento clásico y la formación de hábitos. Similar a la adicción química, estas adicciones modulan la función y la plasticidad del sistema de recompensa mesolímbico y se manifiestan en síntomas que incluyen deseo, control deficiente del comportamiento, tolerancia, abstinencia y altas tasas de recaída.

El papel del azúcar en la adicción a la comida:

La evidencia científica sobre modelos animales sugiere que el azúcar puede ser un agente adictivo en alimentos altamente sabrosos. Las ratas a las que se les da acceso intermitente al azúcar muestran signos conductuales de adicción, como el consumo excesivo, la tolerancia y la sensibilización cruzada.
Cuando se elimina el azúcar de la dieta, las ratas experimentan signos de abstinencia (ansiedad, agresión, dientes temblorosos).

¿Qué pasa con los edulcorantes no nutritivos?

Los edulcorantes no nutritivos provocan un sabor dulce intenso, pero no dan un aumento de la glucosa en sangre. La percepción de dulzura se disocia de la satisfacción nutritiva. Sin embargo, en las ratas, la dulzura intensa de los edulcorantes tanto nutritivos como no nutritivos lleva a fuertes comportamientos de búsqueda de alimentos. Lo que sugiere que el sabor dulce por si solo podría mediar la recompensa y el deseo.
Es importante destacar que disociar el sabor dulce de la satisfacción nutritiva puede provocar antojos dulces compensatorios para restaurar el efecto anticipado y, condicionar alteraciones en el control homeostático.
En algunos trabajos científicos sobre humanos se ha demostrado que los edulcorantes artificiales alteran la recompensa alimentaria y los antojos, aunque en otros estudios no se ha observado lo mismo.
Se necesitan más estudios al respecto, de todas maneras por el momento, los edulcorantes artificiales no pueden excluirse como factores etiológicos de la adicción a los alimentos.

 

¿Cómo vencer la adicción a los hidratos de carbono?

Las intervenciones para la adicción a los alimentos abarcan:
  • La terapia conductual (necesitamos reemplazar un mal hábito por uno más saludable).
  • Abstinencia a hidratos de carbono con alto índice glucémico.
  • Intervenciones ambientales, con esta última se trata de combatir el ambiente obesogénico con impuestos sobre productos poco saludables, restricciones a la publicidad y regulación de los menús escolares, entre otros.
La Escala de Adicción a los Alimentos de Yale (YFAS) se ha establecido como una herramienta confiable para identificar a las personas que presentan síntomas adictivos con el consumo de alimentos.
Como entidad neuro-psicobiológica, la adicción a los alimentos requiere de un sistema de clasificación multidisciplinario basado en la evidencia para mejorar la evaluación y el manejo del paciente.
.
Gracias por visitar el blog.

Referencias:
1- Lennerz B, et al. Food Addiction, High Glycemic Index Carbohydrates and Obesity. Clin Chem. 2018 Jan; 64(1): 64–71.
2- Corsica JA, et al. Food addiction: true or false? Curr Opin Gastroenterol. 2010;26:165–169.
3- Ziauddeen H, et al. Is food addiction a valid and useful concept? Obes Rev. 2013;14:19–28.

Comentarios

Entradas populares